El monte Saint Michel

1/20/2009 Beldz 3 Comments


Aprovechando un artículo sobre el arte religioso francés que he leído esta tarde, me ha parecido oportuno reproducirlo aquí para compartirlo con vosotros, pues hace un resumen bastante acertado de lo que supuso este impresionante monte normando. Cabe destacar que algunas fuentes creen que el monte Saint Michel fue la inspiración para modelar la leyenda de la isla de Avalon, en la cual reposan los restos del rey Arturo tras morir en la batalla de Camlaan. Sin embargo, son muchas las influencias que los autores medievales recibieron a la hora de componer sus obras, así que este símil podría ser tan sólo una falsa teoría, alimentada por el ambiente místico y religioso que desprende la elevada abadía de Saint Michel.

Una cumbre del arte monástico

La imagen de la isla rodeada por las aguas cuando la marea está alta y unida a tierra firme por una ancha franja de arena cuando han descendido, aparece reproducida en multitud de folletos turísticos. Situada en la amplia bahía homónima que se abre al canal de la Mancha y en cuya entrada se sitúan las islas anglonormandas, la pequeña isla costera de Saint Michel es un promontorio rocoso de apenas 900 metros. Un dique de unos 1.800 metros de largo, construido en el curso del siglo XIX, une hoy de modo permanente la isla a tierra firme, pero en el pasado, la subida y la bajada de las aguas con las mareas fueron un factor de gran importancia para su desarrollo, al mantenerla aislada por vía terrestre durante períodos regulares, lo que facilitaba su defensa.



Según una leyenda local, en el siglo VIII, el arcángel San Miguel se le apareció al obispo de la localidad de Avranches, situada en la costa, al noreste de la actual isla, y le encargó la construcción de un santuario en un bosque cercano. Una vez finalizadas las obras, sucesivas mareas socavaron el terreno y transformaron la zona en una pequeña isla. Hacia mediados del siglo X, los monjes benedictinos llegaron a la isla y construyeron allí una iglesia románica. A partir de ese momento, Saint Michel se convirtió en un importante centro monástico. Además, sus condiciones estratégicas le confirieron también una gran importancia militar, característica que mantuvo durante el resto de la Edad Media. Más tarde, sirvió también de prisión y aunque perdió algo de su importancia estratégica, siguió siendo una fortaleza militar relevante. Este carácter viene acentuado por la gruesa muralla que se construyó durante el siglo XV en la parte suroriental para defender el pueblo, situado al pie de la abadía, y las instalaciones monásticas.

Sin embargo, la mayor importancia de la isla se la dio durante siglos su abadía, que fue centro de peregrinaciones. La iglesia románica inicial sirvió de punto de partida para los restantes edificios. El crucero se terminó de construir en el año 1023 y sus lados se elevaron sobre criptas provistas de gruesos pilares, que las elevaron sobre el promontorio rocoso. Junto a la iglesia se fueron construyendo las distintas dependencias del monasterio, iniciándose estos trabajos a comienzos del siglo XI. Son edificios de tres plantas que se elevan a ambos lados del templo formando dos niveles y que destacan por los gruesos contrafuertes que les sustentan y que confieren a todo el conjunto un magnífico aspecto de fortaleza inexpugnable. Allí se encontraban los dormitorios de los monjes, la sala capitular, la cocina, las despensas y varias otras dependencias. El claustro de la abadía es una hermosa combinación de estilos, en el período de transición del románico al gótico. Está formado por una doble hilera de 120 pilares y revela una gran armonía entre todos sus elementos.
  • Texto extraído de: "Monte Saint Michel y su bahía" a Patrimonio mundial de la humanidad: Francia y Europa Meridional, p. 21

ACTUALIZACIÓN

Actualizo tan sólo para comentar una pequeña curiosidad que se relaciona directamente con el "Mont Saint Michel". El sábado pasado, mientras estaba comprando en el Carrefour, encontré unas galletas que llamaron mi atención, en la sección de "comida de otros lugares". Como tengo bastante interés en las especialidades extranjeras, me fijé en unas galletas bretonas que resultaron ser hechas cerca de la bahía de Saint Michel. Y al final, acabé comprándolas. Por si os apetece probarlas, que dicho sea de paso, están muy buenas, os pongo una fotografía de la caja:




3 comentarios:

Raistlin dijo...

Mike Oldfield compuso una canción dedicada a él y todo (al menos se llama así xD), en el disco Voyager.

Muy chula, por cierto :)

Beldz dijo...

Pues ya la buscaré, a ver qué tal. :D

De Mike Oldfield escuché hace mucho tiempo alguna que otra cosa, como el "Tubular Bells", y no estaba nada mal. ;)

Jolan dijo...

Qué bonito es el Mont St. Michel! Ojalá algún día pueda verlo in situ. Gracias por compartir ese artículo con nosotros! ;)